Tuesday, March 29, 2011

El Verdadero Amor

"Porque de tal manera amo Dios al mundo..." (Juan 3:16).  De tal manera amo Dios al mundo que no escatimo en dar a Su Unigenito! No crees tu entonces que El puede darte cualquier otra cosa que necesites? Por que entonces no recibimos? Sera porque pedimos dudando como nos dice el libro de Santiago o sera porque pedimos mal para saciar nuestros sentidos? El Senor siempre esta en la mejor disposicion para suplir nuestras necesidades, segun El lo ha prometido, "porque mi Dios suplira todas nuestras necesidades de acuerdo a sus riquezas en gloria en Cristo Jesus" (Filipenses 4:19).  Nuestro Dios es Fiel y Suficiente para darnos lo que necesitamos, NO lo que QUERRAMOS!  Es de suma importancia aclarar que Dios sabe lo que necesitamos pero El no esta ahi para darnos todo lo que queremos.  Muchas veces lo que queremos no es lo que nos conviene, y El lo sabe.  Aun cuando queremos hacer algo para El (como queria David construirle templo) si no es Su voluntad, El no lo concede.

El verdadero amor es aquel que se da sin condicion.  Asi como Dios y Jesucristo nos aman. El verdadero amor es Cristo! El que se entrego a si mismo para rescatar a la humanidad.  El no pidio nada a cambio; no le importo los desprecios que recibio de aquellos a quien salvava. Su amor fue expresado sin palabras; sin arrempentimiento.  En ningun momento se quejo ni reclamo. Su sacrificio fue verdadero, genuino.  El no trato de manipular la situacion ni escaparse de la situacion, aun pudiendo - "porque si quisiera clamara a mi Padre y El me enviaria un ejercito de angeles para que me socorran" (parafraseado).  El amor de Jesus el Cristo fue, ha sido, y seguira siendo, el unico amor verdadero; un amor sin condicion!

En La Brecha





Nuestro Salvador y Redentor, Jesucristo, fue y aun es nuestro ejemplo del significado y la necesidad de ponerse en la brecha.  Sin la intervención de nuestro Salvador el hombre no tuviera acceso a la vida eterna.  Si Jesús no se hubiese puesto en la brecha, sería imposible para la humanidad mantenerse puro y limpio delante de Dios.  La brecha que el hombre le abrió a Satanás solo se podía cubrir con la sangre de Cristo y el sello del Espíritu Santo. Es de vida o muerte enfatizar que el hombre es redimido solo por Jesús el Cristo y Su amor en la cruz.  El amor es lo que lleva al intercesor a ponerse en la brecha.

Ponerse en la brecha no es más que interponerse (otro sinónimo es insertarse). Jesucristo no solo intervino entre Dios, Su padre, y el hombre sino que tapo la brecha abierta por el hombre a Satanás. Nuestro Salvador cambio el rumbo de la humanidad cuando se puso en la brecha por ella. El hombre estaba sentenciado a morir sin esperanza cuando le abrió brecha a Satanás.  Gracias damos a nuestro Señor Jesucristo que detuvo esa sentencia y le otorgo la oportunidad (por decisión) de elegir vida eterna. Jesús, el Cristo, cubrió la brecha, por la cual el hombre dio entrada a Satanás y sus malicias. Mediante a Jesucristo, el hombre puede combatir a Satanás y sus demonios porque la brecha ha sido cubierta y sellada por el Espíritu Santo. Satanás nunca entra por la puerta grande puesto que el es un ladrón. El es un engañador, usurpador. El no sabe entrar por el frente, el siempre entra por las brechas que están abierta, como los ladrones. Por lo tanto, no debemos abrir brechas para no dar entrada a Satanás y sus demonios a nuestra vida.

El creyente abre brechas cuando peca y no se arrepiente inmediatamente. La práctica del pecado le da permiso a Satanás para entrar a nuestra vida y hacer estragos. En Mateo 12: 43-45, La Escritura nos habla acerca de la casa que se limpia (arrepentimiento) y al tiempo viene el enemigo a chequearla de nuevo. Si la casa continua la práctica del pecado (arrepentimiento fingido), o simplemente vacía, el enemigo trae consigo peores demonios para que la habiten - [43] Cuando el espíritu impuro sale de un hombre, vaga por lugares desiertos en busca de reposo, y al no encontrarlo, [44] piensa: “Volveré a mi casa, de donde salí”. Cuando llega, la encuentra vacía, barrida y ordenada. [45] Entonces va a buscar a otros siete espíritus peores que él; vienen y se instalan allí. Y al final, ese hombre se encuentra peor que al principioPor lo tanto es necesario que cuando limpiemos nuestra vida, al arrepentirnos de nuestros pecados, la mantengamos llena de Jesús y el Espíritu Santo. En caso que los espíritus inmundos, que antes de arrepentirnos habitaban, regresan, encuentren el lugar lleno de Dios y no vacio.
Es importante entender que todos somos intercesores, pero no todos nos ponemos en la brecha.  La Escritura habla de personas que fueron intercesores.  Como ejemplo tenemos a Ester, Daniel, y otros.  Ella también revela aquellos que se pusieron en la brecha por los pecados del pueblo. Entre ellos encontramos los profetas, Moisés.  Nosotros como iglesia intercedemos por el mundo para se arrepienta de sus pecados y  llegue al conocimiento de Jesús el Cristo.  También intercedemos los unos por los otros para que el Señor nos fortalezca y podamos vencer el mundo y sus deleites.  Pero nos ponemos en la brecha por nuestros hijos y por nuestros familiares para que las brechas que han abierto a Satanás sean cerradas y selladas. También nos ponemos en la brecha por aquellos creyentes que se han alejado de Cristo, aquellas ovejas perdidas que antes pertenecían al redil.  
Nos ponemos en la brecha por aquellos que una vez fueron y se han alejado, pero intercedemos por la humanidad para que venga al conocimiento de Jesús el Cristo. En la intercesión nos ponemos delante de Dios, en la brecha tapamos aberturas que se han abierto a Satanás.  Ponerse en la brecha requiere y envuelve más sacrificio.

Tuesday, March 15, 2011

Revelación de Dios

"Lámpara es a mis pies tu palabra,
         y luz para mi camino."


¿Cómo es que decimos que la Palabra de Dios es la que nos guía y andamos como el mundo anda? Esto es paradójico.  El cristiano debe ser congruente.  Si expresamos que la Palabra de Dios es la lumbrera de nuestro caminar, entonces deberíamos andar en santidad.  La Palabra de Dios nos demanda santidad “porque sin santidad nadie vera al Señor.”   Algunos de los sinónimos de santidad son: virtud, integridad, caridad, fe, ejemplaridad.  Debemos ser un ejemplo para el no creyente, manifestando a Cristo en nuestro vivir.  Santidad no quiere decir que somos perfectos o santos.  Santidad es una acción, una característica del creyente, aquel que en verdad se ha negado a sí mismo para andar en el Espiritu. El deseo de nuestro Creador es que andemos conforme al Espíritu.  Cuando andamos conforme al Espíritu podemos resistir las tentaciones y asi no dejarnos manchar por el mundo.  Santiago 1:14 nos dice que "La tentación es la seductora atracción que ejercen sobre el hombre sus propios malos deseos."

“Toda la Escritura nos ha sido dada por Dios, que la ha inspirado, y es útil para enseñarnos la verdad, hacernos comprender nuestros errores y ayudarnos a llevar una vida recta.”  Muchos nos referimos a La Escritura como el diario de Dios porque ella manifiesta y revela al Creador y Su propósito para la humanidad. Entonces, ¿porque no le dedicamos tiempo si en Ella se encuentra el secreto de vivir en armonía con Dios? Algunas de las excusas porque no leemos la Escritura es que “no la entiendo; es difícil de descifrar; se necesita un teólogo para que la explique” etc.  Sin embargo, Dios desea revelarse a sus hijos, por lo que nos dejo al Espíritu Santo para que nos instruyera y revelara lo secreto de Su Palabra.  Efesios 1:17 nos dice: “pidiendo que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en un mejor conocimiento de Él.” La traducción en lenguaje actual lo expresa de esta manera: “Le pido al Dios de nuestro Señor Jesucristo, es decir, al Padre maravilloso, que les dé su Espíritu para que sean sabios y puedan entender cómo es Dios.”

Muchos dicen que ya no hay revelación de Dios. Entiendo que ya no hay mas nada que añadir a la Escritura, pero Dios desea revelarla para que todos la entiendan. Basado en esto, podemos decir que ya no hay más inspiración de Dios, pero aun hay revelación.  La palabra ‘revelación’ en este aspecto se definiría como ‘explicación o descubrimiento’ de las profundidades de los escritos Bíblicos.  Siempre comentamos que ‘la Palabra es vida’ porque leemos el mismo versículo o capitulo varias veces y recibimos diferente mensaje en cada lectura.  También escuchamos que  varias personas leen el mismo versículo y reciben diferente mensaje o ‘revelación’ de ese versículo.  Como podemos explicar esto sino es mediante la revelación divina para cada lector. El Señor conoce nuestra necesidad y nos habla, conforta, redarguye, mediante Su Palabra.  Por lo tanto, un versículo puede ministrar diferente personas a la misma vez, según la necesidad de la persona, en el momento de leer la Escritura.

Santiago 4:2 (traducción en lenguaje actual) nos dice que nosotros no tenemos porque no se lo pedimos a Dios (parafraseado).  En verdad nuestro Creador desea que le codiciemos; que apetezcamos conocerle íntimamente.  El quiere revelarse a nosotros, así como se le revelo Adam. La Escritura no es para interpretación privada;  no es para una sola persona.  Si le pedimos a Dios que nos revele lo inspirado, El lo hará, porque El sabe que la revelación de lo inspirado nos liberta.

Tuesday, March 8, 2011

Regalos vs Frutos del Espiritu

El creyente de estos tiempos se concentra  más en poseer los regalos del Espíritu que en tener los frutos del Espíritu.  Efesios 4 y 1 Corintios 12 nos habla acerca de los dones y la diversidad de ministerios. Estos dones y ministerios son dados por Dios y operados por el Espíritu Santo en la vida del creyente.  28 "Así, en la iglesia, Dios ha encomendado diferentes funciones, poniendo a unos como apóstoles, a otros como profetas y a otros como maestros. También hay los que hacen milagros, los que pueden sanar a otros, los que ayudan, los administradores y los que poseen el don de hablar en lenguas extrañas."  Estos son regalos de Dios (no por obras) a los creyentes para la edificación de la iglesia - “pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho.” 11 "Él mismo repartió diferentes dones: a unos los hizo apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas, y a otros, pastores y maestros. 12 Todo ello a fin de que los suyos estén perfectamente capacitados para conducir la iglesia, esto es, para edificar el cuerpo de Cristo,"
Los regalos del Espíritu nos permiten hacer el trabajo que Dios nos ha asignado.  Cuando acogemos el regalo y lo fortalecemos, daremos un servicio más eficaz para la obra de Dios. Debemos dedicarnos a robustecer el regalo que se nos ha dado, y dejar de desear el regalo y el don (dones) del hermano. Muchos descuidan, y a veces ni se dan cuenta de su regalo,  porque están anhelando y suspirando por lo que tiene el hermano.

Los dones del Espíritu se deben anhelar porque ellos nos ayudan a entender mejor las cosas divinas al igual que al Divino.  Cuando tenemos los dones del Espíritu, podremos descifrar mejor los pensamientos y deseos de Dios.  El discernimiento de espíritus nos ayuda a distinguir si los espíritus son de Dios.  Este don es muy trascendental, (así lo veo yo),  porque nos ayuda a saber si el mensaje viene de Dios.  Muchos creyentes son engañados, por espíritus engañadores, porque carecen de este don.  El hablar en otras lenguas también es muy necesario para la comunicación individual, en el espíritu, con nuestro Creador. Las Sagradas Escrituras nos dice, referente a los dones, en 1 Corintios 12: 4-11:
4 Ahora bien, Dios nos concede diversidad de dones, aunque el Espíritu Santo es la fuente de todos ellos.
 5 Hay diferentes modos de servir al Señor, aunque siempre es a un mismo Señor a quien servimos.
 6 También hay diferentes maneras de actuar, pero siempre es un mismo Dios el que hace todas las cosas en todos.
 7 En cada uno de nosotros, y para beneficio de todos, el Espíritu Santo se manifiesta de una manera distinta.
 8 A uno, el Espíritu le da palabra de sabiduría; a otro, el mismo Espíritu le da palabra llena de conocimiento;
 9 a otro le da fe por el mismo Espíritu, y a otro, por el mismo Espíritu, el don de sanar enfermos;
 10 a otro le concede que haga milagros, y a otro que profetice; a otro le da perspicacia para discernir espíritus; a otro que hable diferentes lenguas, y a otro la capacidad para interpretar las lenguas.
 11 Pero siempre es uno y el mismo Espíritu el que concede tales dones y el que los reparte según su criterio y voluntad.
Los regalos del Espíritu son muy útiles  y se deben anhelar.  Sin embargo, los frutos del Espíritu es algo que todo, absolutamente todo creyente debe poseer.  Cuando poseemos estos frutos es una indicación de que estamos siendo guiados por el Espíritu.  Las Sagradas Escrituras nos dice al respecto:  22 “En cambio, cuando el Espíritu Santo dirige nuestra vida, produce en nosotros frutos de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,23 mansedumbre y templanza, cosas contra las cuales no existe ninguna ley.” Contra estas cosas no hay ley porque no está regida por una norma, es algo que solo puede venir del Espíritu Santo.  Cuando el Espíritu Santo nos dirige, nuestra naturaleza pecaminosa se desautoriza y no tiene poder sobre nosotros, “24 Y los que pertenecen a Cristo han clavado en la cruz los impulsos de su naturaleza pecadora.”
Por lo tanto, es esencial poseer los frutos del Espíritu, sin dejar de anhelar los regalos.  Como dijo el Maestro: Es necesario hacer esto, sin dejar de hacer aquello (Lucas 11:42 parafraseado). Los frutos del Espíritu en el creyente son una evidencia de obediencia al Señor.  Ellos señalan al creyente que ha sido un "buen siervo" y que ha multiplicado sus talentos.  Aquel creyente que ha dado frutos en la obra del Señor y en la edificación de la iglesia.


El Dia del Senor

Joel: 1:15 15 ¡Ay del día! porque cercano está el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso. 16 ¿No fue arrebatado el al...