Sunday, November 8, 2020

VIVIR CON PROPOSITO

 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, más tenga vida eterna

 (Juan 3:16 LBLA)

Antes de la Creación ya existía el Plan Salvífico de la Redención. Este no fue un plan sorpresa, pues a Dios nada lo asombra. Los planes de El ya están realizados en el futuro y existen por la eternidad. 1 Pedro 1:20 relata: “Cristo, a quien Dios escogió antes de la creación del mundo, se ha manifestado en estos últimos tiempos en vuestro beneficio.” La humanidad vive en un presente, pero Dios en un continuo futuro. Él es Omnipresente, Omnisciente, ocupando todo espacio y tiempo, y todo lo creo con intención. El ordeno La Tierra y la regalo a Su máxima creación; el único ser hecho a Su semejanza, el Hombre. Este fue creado intencional, con planes y propósito. Lamentablemente, ese propósito se entorpeció cuando desobedeció a su Creador, transgrediendo Su ordenanza. De esa manera, rompió el vínculo espiritual que existía entre ellos.

Uno de los sinónimos de Propósito es intención. Cuando comprendemos el designio de la vida que se nos regaló, las cosas materiales no ocupan espacio y los sufrimientos se reciben con valor. Culpar a nuestro Creador no está en nuestro pensamiento ni vocabulario. Entendemos que existe un proyecto que está bajo el control de su Perito, y teniendo esa realización, todo lo aceptamos con decoro.

Todo es fácil cuando las cosas van bien. En el momento que las situaciones se tornan contraria a nuestra expectación, el sentir cambia. Al contrario de una persona con propósito, aunque no reciba su aspirar, continua la esperanza viva, ya que la esperanza no es situacional sino El. Dios no deja de tener Gloria o Autoridad cuando estamos pasando por el fuego. Él no ha cambiado el Proyecto. En ocasiones, los instrumentos se encorvan en Su mano y el Labrador tienen que darle con el martillo para volverlo a enderezar, y poder ser nuevamente útil (Jeremías 18). Dependiendo el material y uso definido de los instrumentos, a veces deben ser pasado por el fuego. Ese fuego, controlado y supervisado por el Labrador, aunque quema y pica, restaura.

Una vida con propósito lo primero que reconoce es que tiene un Hacedor y un Salvador que han diseñado su vivir. Hasta que no reciba esa revelación, camina sin rumbo, recibiendo y aceptando todo lo que encuentra delante. Envolviéndose en un ciclo vicioso y esperando resultados diferentes. Su dependencia no es del Hacedor, por lo tanto, depende de lo que mira y posee.

Jesucristo es nuestra Esperanza y ninguna montaña es difícil de escalar cuando Él es quien guía. Propósito es un elemento importante para continuar adelante en medio de los obstáculos. El apóstol Pablo tenía la mira puesta en Cristo. Él estaba determinado a terminar la carrera para alcanzar el premio final. Todo lo que Pablo hacia era con intención. Predicar el Evangelio a los Gentiles fue su encomienda y él estaba determinado a cumplirla. Sin determinación ni intención lo que proyectamos hacer se hace difícil lograr ya que los obstáculos que se presentarán pueden detener la obra. Jesucristo nos manda a ser valientes; solo los valientes conquistan el reino de los cielos. Cantar, adorar, testificar y hablar de Cristo se hace más efectivo cuando lo hacemos en medio de las tormentas de la vida. Las montañas que parecen inmovible, cuando las alcanzamos, recibimos nuevas fuerzas, aumentando la fe que podemos subir otras más altas y rocosas. Lo que el Hacedor decida, estará bien con nuestra Alma cuando vivimos vida de propósito.

Como creyentes en el Evangelio de Jesucristo, debemos aprender que todo lo que pasa debajo del cielo tiene una razón, un sentido; es parte de un propósito, de un proyecto gigante, quizás colectivo, que no entiende el Alma. los proyectos de Dios son más altos que el entendimiento humano. Sin embargo, nuestra confianza debe permanecer en El. Poniendo siempre nuestros ojos en Cristo el Autor y Consumador de la Fe. Dios es fiel, y Sus promesas son Amen; debemos descansar en Su providencia y soberanía. Los planes que Él tiene para Sus hijos son de bien, y Sus tiempos son perfectos.

El creyente debe vivir con propósito cristianos. Creciendo continuamente en fe. Una Fe que de frutos de arrepentimiento y naturaleza divina.

 

 

 

 

 

 

Sunday, May 17, 2020

HABLA A TU ALMA


  • “BENDICE, alma mía á Jehová; bendigan todas mis entrañas su santo nombre.Bendice, alma mía, á Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.Él es quien perdona todas tus iniquidades,El que sana todas tus dolencias;El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias;El que sacia de bien tu boca De modo que te rejuvenezcas como el águila”
  • Salmo 103:1-5 (SRV-BRG)


El rey David entendía la necesidad de platicar de continuo a su Alma. En especial instruirla acerca de su Creador. Cuando el Alma se olvida quien la formo, tiende enorgullecerse; tornarse soberbia, rebelde, creyendo que Es una entidad privada, sin dueño, buscando independizarse. David le exhorta y recuerda alabar a su Dios incesablemente, enfatizando los beneficios de la alabanza.

Cada persona pelea sus batallas de manera diferente. Algunas oran, otras interceden, ayunan, hacen cilicio (despojarse de comodidades, incluso del celular), y otras adoran. David era un adorador, por lo tanto, el usa la Alabanza y Adoración para acercarse a Jehová su Dios, buscando ayuda y descanso.

La práctica de hablar al Alma es sumamente importante. Debemos recordar que somos un Alma, que vive en un Cuerpo y tiene espíritu. Ese espíritu es que le da vida (respiro de Dios). Jesús vino a salvar Almas. Cuando el hombre fallece/muere, el espíritu regresa a quien lo dio – a Dios.  El Alma es la que se salva o pierde. El Espíritu Santo se comunica con el hombre a través de su espíritu. Cuando el Alma anda perdida, permanece en lucha constantemente con el espíritu para que no se comunique con el Espíritu Santo. El estudio de la moral le llama al espíritu del hombre Conciencia y Super Ego.   

En tiempos de invierno, valle/estrechez, ansiedad, depresión, tristeza, desolación/desierto, habla a tu Alma y recuérdale quien es su Dios. Mientras estemos en este vaso de barro, que llamamos cuerpo, experimentaremos angustias y desesperación. Debemos tener como practica hablarle de nuestro Salvador Jesucristo a todo que causa estrago, sea angustia, desesperación, enojo, ira, debilidad, tentación, maledicencia, enfermedad.

Habla a tu Alma como si hablaras a alguien que tienes en alta estima; que amas, que valoras; que deseas el bien. Cuando sea necesario exhórtala, amonéstala, ensálzala (cuando hace lo bueno). En 2nd Timoteo 4, Pablo le insta al joven ministro que sea exigente, persistente, constante. De igual manera, debemos serlo con nuestra Alma: redargüirla, reprenderla; exhortarla con toda paciencia y doctrina (4:2). Instarla a tiempo y fuera de tiempo (cuando este bien y cuando este mal) para que se administre de acuerdo con las instrucciones cristiana y pueda llegar a la victoria de vida eterna con Jesucristo. Nunca te canses de platicar con tu Alma y recordarle quien es Su Dios y Salvador.

“ALMA MIA ALABA A JEHOVA”

 

 


Sunday, May 3, 2020

Al Amparo del Altísimo


Al Amparo del Altísimo

“Porque hiciste del Señor tu refugio y del Altísimo tu defensa. No te llegara la desgracia, ni la plaga rondara tu tienda. Lo librare, porque se aferró a mí, lo protegeré, pues conoce mi nombre,” (Salmo 91:9-10; 14 LBLA).

El Salmo 91 es uno de los escritos Bíblicos más conocido tanto por creyentes como por gentiles. Es frecuentemente recitado por la magnitud de la protección Divina que despliega. Podríamos decir que hasta los enemigos de Dios (satanás y sus demonios) conocen de este Salmo. Los opuestos a la cruz de Cristo han escuchado de este escrito. Muchos lo colocan en sus casas (Biblia abierta, cuadros, etc.) como forma simbólica de protección, y algunos hasta lo idolatran. Este Salmo, al igual que todas las promesas Bíblicas, solo se activan, tomando acción y cumplimiento en aquellos que ponen al Altísimo por su habitación.

Dios no puede ser burlado. El conoce los corazones y sus intenciones. Existen personas que usan El Libro (La Biblia) de forma errónea, para “espantar los espíritus malos” o para “buena suerte.” Estas personas no leen la Biblia, pero creen que, si lo mantienen abierto en ciertas páginas, con esto “los malos espíritus” no penetran en sus hogares y familiares. ¡Que gran error! La Biblia se activa y se hace efectiva en aquellos que la leen y creen en Ella; que es la Palabra inefable de Dios.

La Biblia es la innegable Palabra de Dios. Muchos la cuestionan, pero “por si acaso” la usan para “espantar lo malo” de sus casas. Los que dudan de la veracidad de La Biblia, NUNCA recibirán las bendiciones que Esta ofrece. Las escrituras del Libro Sagrado son la que tiene poder…recitar lo escrito, creyendo, es lo que aleja a satanás y sus demonios. Conocimiento sin creencia no tiene efecto. Todo aquel que cree con su corazón y profesa con su boca que La Biblia es la Palabra de Dios, por fe, entonces también cree lo que Ella dice. Las promesas que Esta encierra, es para los que creen en Su Escritor; El Inspirador y lo que El revela: ¡La Salvación de la humanidad por medio de Su Hijo Jesucristo! Este entendimiento, y solo este entendimiento, te permite morar bajo la sombra del Omnipotente.

Todo el que ha hecho del Altísimo su habitación, vive bajo Su amparo. La Sombra del Todopoderoso cubre a todos aquellos que le honran en obediencia. El que hace del Altísimo su morada vive seguro, en paz, nada le causa ansiedad ni molestia. La Palabra de Dios garantiza que los que hacen del Altísimo su morada; su habitación; su lecho, ni la plaga ni la desgracia los tocara. El Padre mira La Iglesia rociada con la sangre de Su Hijo Jesucristo, por lo tanto, La Sangre de Cristo limpia el pecado del hombre que lo hace su Señor y Salvador. No existe otro Evangelio. No existe otro camino al Padre. Solo Jesucristo es la Verdad, el Camino y la Vida y nadie viene al Padre si no es por El (Juan 14:6). Porque de tal manera amo Dios al mundo que envió a Su Unigénito, para que todo aquel que cree en El no se pierda más tenga vida eterna (Juan 3:16). ¡Cristo Jesús Señor nuestro! 

¿Quieres recibir las bendiciones que declara La Biblia? Solo existe una vía, Jesucristo y Su Evangelio. Cree en El y será salvo tú y tu casa.





Sunday, March 22, 2020

Cristo Revelado

8” Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo…”
Filipenses 3:8
(RVR1960)

“¡Dejarlo TOOODO por el CONOCIMIENTO de CRISTO!” es la expresión de un hombre que sucumbe a los deseos del cuerpo y las tentaciones que el mundo ofrece. Expresiones como estas solo surgen cuando se llega a un nivel de conocimiento de la Cruz de Cristo; lo que El padeció para restaurar la relación del Padre con su Creación; impidiendo la maldición de la muerte eterna sobre la humanidad. 

En Gálatas 2:20, el apóstol Pablo señala: “con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, más vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.” Para el apóstol, Cristo lo era todo. El no permitía que ninguna cosa le quitara el tiempo o energía; no permitió distracción que lo desenfocara. Todo su ser, cuerpo, alma y espíritu estaban mezclados y conectado a Cristo y Su encomienda. Pablo trabajaba diligentemente para complacer a su Amado y Dueño. Él había hecho a Cristo no solo su Salvador, sino también su Señor. Esto es fundamental en el caminar cristiano. Pablo estaba persuadido con el Evangelio de Jesucristo. Por lo tanto, expreso que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ¡ni lo por venir…” lo separarían del amor de Cristo y están son declaraciones de un convencido. La convicción es la que impulsa a dejarlo todo por Cristo. Cuando Cristo le he revelado al creyente por el Espíritu Santo, una sensación de excelencia embarga y domina su Alma, y una emoción de regocijo su espíritu. En lenguaje gentil, un “hechizo,” un “encanto”, un “cupido” que con su lanza penetra el corazón.

Un cristiano de conversión genuina se expresa como el apóstol Pablo. Este posee la excelencia de Cristo; el Yo no existe, solo Cristo domina y es visible en su caminar. Testifica que las circunstancias no determinan su existir. Camina firme, y vive una vida de confianza en la fe que ha creído. Decide imitar a Cristo, amonestando todo deseo del mal que contrarresta el conocimiento de Él.

El espíritu de discernimiento, regalo del Espíritu Santo, ayuda identificar un cristiano de conversión real, ya que “no todos los que dicen Señor, Señor” son realmente trasformados. Romanos 12 habla de la nueva vida en Cristo; como debe presentarse un cristiano entendido en la realización de la salvación, señalando las normas concretas de conducta de aquel que ha perfilado y adaptado esa nueva vida. El apóstol Pablo, insta a que nos ofrezcamos como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios (Romanos 12:1 parafraseado). El conoce los beneficios y premios de este sacrificio. Uno de ellos es revelación y entendimiento de Dios Padre y Su deseo para la humanidad: “…transfórmense, renueven su interior, para que puedan descubrir cuál es la voluntad de Dios, que es lo bueno, lo que le agrada, lo perfecto” (Romanos 12: 2). Otro es el amor verdadero. Amor que tanto el Padre como el Hijo nos mostraron (Juan 3:16). Cristo lo mostro en la cruz, no estimando su vida y gloria con el Padre para venir a la tierra y salvar la humanidad.

Presentémonos aprobados delante del Padre - Cristo pago el precio - como obreros que no tenemos de que avergonzarnos, usando La Palabra de verdad. No contristemos al Espíritu Santo, usando nuestros miembros para deshonra, al contrario, sacrifiquemos los deseos carnales y glorifiquemos a Cristo con todo nuestro ser – vale la pena.


La excelencia del conocimiento de Cristo; tener una relación con Él es hermoso!




Herencia Significativa

“ Y LLAMÓ Jacob á sus hijos, y dijo: Juntaos, y os declararé lo que os ha de acontecer en los postreros días. 2  Juntaos y oid, hijos de Jac...